“Hay un antes y un después de la pandemia”, expresa la directora del Vniversitas Senioribvs del CEU, María García-Carrillo. De su mano conocemos algunos de los cambios que han ido surgiendo desde ese punto de inflexión, hace ya cuatro años, en el ámbito universitario para mayores.

Hasta ese momento, cuando la OMS declara la emergencia de salud pública por la Covid-19, el alumnado sénior siempre había sido absolutamente presencial y, de hecho, como expresa García-Carrillo, “lo sigue siendo mayoritariamente, debido a la brecha digital y a la importancia de socializar en clase”. Sin embargo, la pandemia trajo una serie de cambios.

Como expresa la directora de Vniversitas Senioribvs, “lejos de aniquilarnos, la pandemia abrió a los sénior todo un mundo nuevo: han descubierto también las bondades de un online bien hecho en el que pueden interactuar con sus profesores y alumnos; no perderse sus clases cuando viajan porque pueden ver la clase online en directo desde cualquier parte del mundo; ver sus clases grabadas cuando puntualmente no pueden (o no quieren) ir un día a clase, o conocer cómodamente desde casa a otros alumnos de cualquier parte de España o del mundo con sus mismos intereses”.

Desde el año 2000, la Vniversitas Senioribvs es uno de los Centros Educativos de la Fundación Universitaria San Pablo CEU que, impartiendo formación a todos los niveles, cierra el ciclo de enseñanza con esta Universidad para Mayores. Se trata de un Programa Universitario de enseñanza no reglada, donde no se precisa titulación previa para acceder ni se realizan exámenes, dirigido a adultos con inquietudes culturales, y absolutamente libre y flexible –el alumno puede optar por cursos completos o asignaturas sueltas–.

En la Vniversitas Senioribvs del CEU, de un total de 1.750 alumnos en el curso 2023-24, unos 350 de ellos se han matriculado en alguna asignatura online o bimodal. “Esto nos ha obligado a las universidades de mayores a rearmarnos digitalmente; a invertir en tecnología y ha convertido a nuestros profesores en alumnos en lo que a digitalización se refiere”, destaca García-Carrillo, que añade que desde el curso 23-24, tres de sus aulas ya han sido Hy Flex, para poder impartir clases bimodales y online. Además, explica que todo el claustro de profesores ha recibido cursos de formación para “aprender a enseñar de otra manera”.

La irrupción de la pandemia también ha abierto nuevas ventanas al mundo, a los alumnos y a la universidades. “En la Senioribvs, ahora mismo, tenemos alumnos siguiendo tranquilamente sus clases online en directo desde toda la geografía española y desde Alemania, Holanda, Bélgica, Italia, Portugal, Estados Unidos, Méjico, Lima, Bogotá, Argentina, Venezuela, República Dominicana y Tanzania”, repasa la directora. En resumen, dice, “la universidad de mayores es hoy verdaderamente universal y la Senioribvs es, ahora mismo, uno de los centros más internacionales del CEU”.

En lo que respecta a la evolución del perfil de los alumnos, esta no ha variado demasiado: asisten cada vez más alumnos por debajo de edad de jubilación, más hombres que mujeres –cuando anteriormente noe ra así– y están cada vez más preparados. “En la Senioribvs, el 93% de nuestros alumnos son licenciados y van desde los 40 hasta los 93 años. Solo un 20% de ellos están por debajo de la edad de jubilación, pero es que este porcentaje antes era prácticamente inexistente”, explica la directora de esta universidad. 

Tradicionalmente, el contenido de los cursos para mayores en todas las universidades del mundo era similar, ya que mayoritariamente los sénior se matriculaban en humanidades Historia, Arte o Filosofía. “Cuanto más de ciencias fuera profesionalmente el alumno, más le interesaba las humanidades, para quitarse esa ‘espinita’. De hecho, durante muchos años en la Senioribvs hemos intentado por todos los medios introducir líneas de ciencias, sin mucho éxito, excepto las TICs, claro. Solo recientemente hemos conseguido introducir, y con mucha matrícula, Genética y Neurociencia, en nuestra oferta académica”, expone García-Carrillo.